Klandestinos celebró este sábado su fiesta 25º aniversario con un vermú solidario por la mañana en la plaza Mayor y un concierto en la sala Oxido, con buena entrada, donde presentaron su último disco 'K-25' junto a la charanga Ojayo y Super8 Dj´s. • Repasaron temas del rock estatal de grupos como La Polla, Leño o Barricada pero también temas de Nirvana, Blur o Steppenwolf y bandas de cine como Rocky.
Vermú por la mañana. Concierto por la noche en la Oxido. Klandestinos es mucho más que una charanga y así quiso demostrarlo este sábado en su 25 cumpleaños. Aprovechó la cita para presentar su último trabajo de estudio, K-25, un álbum lleno, otra vez, de 'perversiones', que abre el clásico 'Born to be wild', de los canadienses Steppenwolf.
El viaje 'klandestino' arrancaba más allá del mediodía, rayando la una y media en la plaza Mayor, junto a los puestos de artesanía. Entre cervezas, tintos de verano, gafas de sol, sangría y combinados varios se apilaban también kilos de comida. El vermú solidario, organizado por Spynce, la peña a la que pone música Klandestinos desde hace 20 años, se alargó hasta las tres de la tarde, entre rancheras ('Sigo siendo el rey'), pausas para retomar fuerzas o cambiar partituras y canciones de rock como la maravillosa 'Creep', de Radiohead.
Una reinvención que se agradece, y que también se pudo oir por la noche en la actuación de la charanga Ojayo, de Aranda de Duero (Burgos), porque engrandece la propuesta musical, haciendo posible escuchar desde una fanfarria a swing, rock de los 7o, música de cine o rancheras.
Aunque la cita en la Óxido invitaba al concierto a partir de las 21 horas, no fue hasta las once cuando Klandestinos aparecieron en el escenario. El público fue llenando poco a poco la sala, hasta llenarse prácticamente. Los diez klandestinos abrieron fuego con sus saxofones, trombones, tubas, batería y bombo; con traje de verano, faldas escocesas, gafas de sol y delantales de cocina para hacer disfrutar al personal con temas de cine (Rocky) y después descubrir su arsenal sonoro dedicado al brit pop de los 90, como 'Song 2', de Blur; al punk-rock de Offspring y Green Day y el grunge de Nirvana (inevitable 'Smells like teen spirit').
Tampoco faltaron canciones reconocibles de grupos de rock nacional como Reincidentes (vicio, vicio...) y Barricada ('No hay tregua') o Ska-P. En la recta final, sonó la versión acelerada de 'Comandante Che Guevara', de Victor Jara y el sonido de La Polla Records, con el que finiquitaron una actuación de hora y media que dio paso a la charanga Ojayo, formación amiga que también está de aniversario -cumple 15 años-.
A estas alturas de la noche, pasadas las 00:30 horas, hubo gente que emigró; bien a otros espacios de la sala, bien a la calle. Ojayo seguía sirviendo su show con rancheras, la contagiosa 'Smoke on the water', de los Purple o un popurri de Mecano que el público bailó inevitablemente. Si algo tiene la música de charanga es la virtud de hacer despegar casi siempre los pies del suelo, aunque su habitat ideal sea la calle.
Fuente de la noticia: http://wwwculturaenguada.es, 11 de mayo de 2014